Señora Mariposa (Teatro Mariinski II, Nueva Escena, ópera)

Acto I
Pinkerton compra una casa. Él le dice a Sharpless de su enamoramiento de una chica japonesa y de su intención de casarse con ella para "novecientos noventa y nueve años", con el privilegio de nulidad cuando sea conveniente. Levedad de Pinkerton trastorna Sharpless, quien trata de convencer al teniente de la gravedad de una relación con una chica japonesa. Pinkerton repite la intensidad con que la ama.
Riendo voces de las chicas japonesas son escuchadas y Cio-Cio-San aparece. Ella presenta a sus familiares y amigos para Pinkerton. Actualmente, se informa a su amado que por su causa se ha renunciado a su religión. La ceremonia de matrimonio se interrumpe cuando el tío de Cio-Cio-San parece condenar a su sobrina para renunciar a su pueblo. Con desprecio, sus parientes desprecian la chica y salen. Mariposa rompe a llorar, pero pronto se calmó por la ternura de Pinkerton. Como desciende la noche, los amantes son felices en los brazos del otro, ya que confían sus sentimientos apasionados.

Acto II
En la casa de la mariposa Suzuki reza ante una imagen de Buda. Mariposa ella reprende suavemente para apelar a un dios japonés. Aún así, la mariposa es fiel a Pinkerton, que se ha visto obligado a salir con la flota norteamericana, y ella es fiel a su religión y el país, seguro que un buen día él va a volver a ella. Sharpless trae Butterfly una carta que ella está a punto de leer cuando el agente matrimonial llega con un pretendiente rico. Butterfly es sordo a todas las proposiciones. Cuando Sharpless indaga lo mariposa haría si Pinkerton fuera a abandonarla, ella responde con gravedad que iba a suicidarse. Ella ahora llama en el niño, poco problema, que es el fruto de su amor. Sharpless ahora sabe que una terrible tragedia es inminente. De repente llega desde el puerto el sonido de un disparo de cañón. Cio-Cio-San se da cuenta de la nave de llegar y se entera de que
Pinkerton ha regresado. A la espera de su amado de regreso, de la mariposa ayuda a Suzuki a decorar la casa con flores de cerezo. A continuación, se pone su vestido de novia, pero días pasa a la noche y no hay indicios de Pinkerton.

Acto III
El amanecer ha llegado. Cansado de su vigilia, la mariposa se va a una habitación interior. Mientras ella está ausente, Pinkerton y Sharpless llegan a la casa de la mariposa. Suzuki está abrumado con alegría al ver a Pinkerton, pero cuando ve a una mujer americana al lado de Pinkerton ella siente lo peor.
Sharpless persuade Pinkerton dejar sin ver a la mariposa.
Después de una oferta adiós a la casa y sus recuerdos, Pinkerton se aparta. Cuando la mariposa se precipita en la habitación en la que se encuentra no Pinkerton, pero Sharpless y una mujer extraña. Cuando ve a su siervo en lágrimas que empieza a comprender lo que ha sucedido. La mujer estadounidense - la esposa de Pinkerton Kate - implora Cio-Cio-San entregar al hijo de su Pinkerton. Por fin, Cio-Cio-San está listo para hacer esto - pero sólo a condición de que el propio Pinkerton realiza la solicitud. Cuando Sharpless y Kate dejan llamar Pinkerton, mariposa plantea una daga en la garganta. Parece poco problema. Mariposa ordena su despedida niño ... Entonces ella va detrás de una pantalla con su daga. Un momento después se tambalea hacia fuera; por el momento parece Pinkerton, ella está muerta.
Pinkerton está abrumado por el dolor